Mal te perdonarán a ti las horas:las horas que limando están los días,los días que royendo están los años.
A diferencia de su irado Garcilaso, Luis de Góngora no fue siempre un poeta indiscutible: la difusión de sus Soledades provocó una de las mayores controversias de nuestras letras, y sólo a partir de 1927, tras más de dos centurias de incomprensión y arrumbamiento, alcanzó a...