Shiori es una princesa y la pequeña de seis hermanos varones. Pero tiene un secreto, ya que posee magia prohibida en su interior. Un día, en su ceremonia de compromiso pierde el control y ocurre una catástrofe, lo que atrae la atención de su madrastra, la cuál es una hechicera. Ella y sus hermanos reciben una gran maldición, ellos se convierten en grullas y a Shiori se le prohíbe hablar. Por lo que comenzará un camino para salvar a su familia. Tenía muchas ganas de leer esta fantasía asiática, la portada es una maravilla y la historia es impresionante. Me ha encantado su ambientación en China, las costumbres, leyendas, todo rodeado de magia. La autora tiene una forma de escribir preciosa, con las descripciones necesarias para entender perfectamente, en cada capítulo ocurre algo distinto y se van desvelando muchos secretos, aunque no tiene un gran ritmo, es muy ameno de leer y te atrapa por completo. Es un retelling del cuento de los seis cisnes de los hermanos Grimm y me ha encantado esta reinterpretación. Lo único que tiene segunda parte, pero la trama central de esta historia se cierra, pero queda abierta otra aventura. Shiori tiene una evolución increíble, ya que pasa de ser una princesa con todo lo que conlleva, a ser una chica desconocida que no tiene nada y tiene que trabajar muy duro. Por lo que su carácter también tiene que cambiar y sus aventuras van a conseguir que cambie hasta su forma de pensar. Una historia que nos demuestra que las apariencias engañan y que tenemos que esforzarnos para conseguir nuestros objetivos. Me ha encantado el personaje que le acompaña, es adorable. Una historia muy completa, unión fraternal, con magia, leyendas, comidas típicas, cultura asiática e incluso romance.