Un libro imprescindible para todos los gamers de los 80 y 90 que pasaron horas y horas jugando a sus consolas
Si tu primer amigo fue un Commodore 64, si veías el mundo en 8 bits, si por las noches soñabas con piezas geométricas cayendo del cielo, si tú eras de Ken y tus amigos de Ryu, entonces seguro que jugaste a videojuegos en los 80. Perteneces a aquella generación que tuvo que pelearse...