Un slow burn altamente adictivo.
A veces los mejores planes son los inesperados.
Zoe y Axel son polos opuestos y, a la vez, muy similares.
A él le encantan las matemáticas; ella las odia.
Él es reflexivo; ella da muy pocas vueltas a las cosas.
A él no le gusta el chocolate; a ella no le importaría alimentarse de por vida a base de dulces.
Los dos creen que no encajan, los dos agradecen...